viernes, 11 de julio de 2008

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Puede que sea tarde ya, para pedirme que no te quiera,
Tan tarde que es probable que ya me ha tatuado tu nombre en mi cuerpo,
Y que no pueda dejar de imaginarme teniendo diálogos contigo,
O explicarte los suspiros que me provocan tus besos no dados.
Es posible que haya tratado de escribir esto, más de una vez,
Pero las letras se peleaban con tu imagen y no mantenía un orden que formara
Las palabras correctas, [pero es que esto en si ya es incorrecto].
La graciosa madrugada ya me ha alcanzado,
Y yo sigo sin dormir, alucinando esa sonrisa que ya había descrito antes, [la sonrisa que se te hace cuando piensas en ella].
Acomodada de distintas maneras,
Escuchando los ruidos que corroen las plantas que parecen silenciosas,
[Recuerdo haber sabido que te gustaban los árboles] mañana intentare plantar algunos,
Así cuando pases por casualidad tal vez elijas uno que nos pertenezca. [espero que no tardes mucho, se podría secar].

miércoles, 2 de julio de 2008

sobre un cuadro rojo que hay en mi pared y dispersa mis pensamientos...

El ridículo sonido de mi aire acondicionado, que solo produce aire caliente y el sonido de mi refrigerador viejo, me impiden concentrarme en la mancha roja que hay en mi pared.
La acción enemiga del pensamiento, se ha disuelto trasformada en el ocio, fiel compañero de las ideas que rondan por mi cabeza sin orden concreto, así simplemente pienso en nada y termino hablando de todo[o de nada], de aquellas manos perdidas en la chapa de mi puerta[tus manos], las manos que buscan el mundo paralelo[aquella que no soy yo].
Esencia, la perdí
No la quiero
Y encendemos el televisor de bulbos, para ver nuestras vidas retratadas, en personajes que caminan descalzos, en desiertos y bosques, con humo de cigarro y estrellas sobre sus cabezas.
[Me absorbe el cuadro rojo de una pared móvil].
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